Si tengo que escoger una disciplina dentro de la fotografía, elegiría sin lugar a dudas la fotografía salvaje. Es con mucho la que te transmite y te llena más que cualquier otra, te muestra lo verdaderamente auténtico, sin adornos, el modo de vida, el grupo, el entorno, la supervivencia, el afecto, y todo sin planificar, enfocas con tu cámara y cuentas una historia. Como en el anterior post de Nick Brandt, hoy os presento el trabajo del fotógrafo y escritor sudafricano Steve Bloom. Desde la selva de Borneo a los ríos helados de la Antártida, pasando por la sabana africana, ha recorrido el mundo durante más de quince años fotografiando animales en su entorno natural. (pulsa para ampliar)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
He visto safaris a Kenia por 2500 euros en Muchoviaje, 8 días. A quien le interese. Pero dudo que hagáis fotos tan buenas como éstas.
Me hubiera gustado saber como quedó el tema del tiburón volante que se va a zampar la foca. Es increíble.
Publicar un comentario